jueves, 29 de marzo de 2012

Agricultura familiar campesina frente a la hambruna

Una misión de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), resaltó las prácticas innovadoras de las Organizaciones Económicas Campesinas Indígenas y Originarias (OECAs) para consolidar la Soberanía Alimentaria en Bolivia y la lucha contra la inflación y el hambre.

El oficial de políticas de la FAO de América Latina y el Caribe, Adomiran Sanches, visito Bolivia con el propósito de conocer experiencias de agricultura familiar, llevándose una impresión positiva de las OECAs, resaltando su creatividad para enfrentar la hambruna que afecta a más 2 millones de bolivianos y bolivianas y a 52.5 millones de habitantes de América Latina.

La apreciación la realizo en la visita de campo efectuada, por el experto a la OECA denominada Asociación Integral de Productoras Mujeres Andinas (AIPMA), que se encuentra en el Municipio de Batallas en la Provincia Los Andes del Departamento de La Paz.

HORTALIZAS EN EL ALTIPLANO

El Director de la Coordinadora de Integración de Organizaciones Económicas Campesinas Indígenas y Originarias (CIOEC Bolivia), Javier Valda, informó que la producción de hortalizas es una alternativa de diversificación económica para la generación de ingresos a familias dedicadas a esta actividad. Un ejemplo claro es el trabajo de un socio de la OECA que produce hortalizas 6 veces en el año agrícola, haciendo un total de 3 mil 600 cabezas de lechuga, comercializadas a 1.5 Bs generando 5 mil 400 bolivianos.

“Los invernaderos tienen un espacio de 75 metros cuadrados, instalados en pleno altiplano cuyas condiciones socioeconómicas y climáticas no limitan la producción hortícola diversificada y permite que la alimentación de los habitantes sea rica en vitaminas y proteínas”, acotó.

Explicó que el 2012 se tiene proyectado concluir un invernadero de 250 metros cuadrados por familia, con un sistema de riego por goteo, con cuya infraestructura se pretende triplicar los ingresos de los productores, para dicho propósito se viene gestionando recursos no solo de donación sino también de crédito, que permitiría el desarrollo real del sector.

GOBIERNO DEBE VALORIZAR TRABAJO CAMPESINO

Llamo a la reflexión a los gobiernos y políticos no solo de Bolivia, sino de Latinoamérica, quienes deberían revalorizar el esfuerzo de los pequeños productores, OECAs y comunidades, tradicionalmente la política pública agrícola no ha reconocido el trabajo de base a nivel local.

“Es necesario generar un dialogo participativo que permita ganar al país, a los pequeños productores y sobre todo al consumidor para el acceso de alimentos sanos”, atendiendo la demanda de mejorar las condiciones de seguridad alimentaria y la producción de mas alimentos y de mejor calidad, puntualizó.

SOYA PARA LA ALIMENTACIÓN

Según el experto, las políticas públicas deben concentrarse en utilizar las experiencias existentes, como es el caso de las OECAs enfocada en la alimentación escolar, garantizando no solo el acceso si no la calidad del alimento producido por los pequeños productores, lo que no ocurre con los grandes productores que exportan soya para el consumo exclusivo de las vacas de Europa.

Se debe fortalecer también la educación alimentaria, que pueda influir en los hábitos alimenticios permitiendo el consumo de alimentos de calidad y no cantidad, evitando así los altos índices de obesidad por el consumo de alimentos de baja calidad.

También, recomendó incentivar el programa de compras públicas, desayunos escolares, subsidios y sobre todo los bonos, Juana Azurduy, Bono Juancito Pinto, deberían ser pagados con alimentos producidos por los pequeños productores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario