El Gobierno aprobó ayer un decreto que suspende temporalmente, hasta el 31 de diciembre de 2013, el Gravamen Arancelario (GA) a cero por ciento (0%) para la importación de tomate fresco o refrigerado y sus derivados. Los productores apoyan la medida siempre y cuando la misma se suspendida cuando se comienza a cosechar una nueva producción en los próximos 100 días.
Pérdida. En los últimos meses este producto escaseo en algunas regiones del país en especial en Santa Cruz, por las fuertes heladas caídas en la zona de los valles, principal proveedor del fruto de la capital oriental. El fenómeno entre julio y agosto ocasionó la pérdida de 201 hectáreas de tomate.
Según la información brindada a través de una nota de prensa del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, la medida busca garantizar el abastecimiento de tomate en el mercado local y contrarrestar la subida de precios.
De acuerdo con el reporte del Instituto Nacional de Estadística (INE) la variación acumulada del Índice de Precios al Consumidor (IPC) para agosto de 2013 alcanzó a 4,23%, de un proyectado de 4,80% para la presente gestión. Uno de los rubros que incidió en mayor medida a este incremento del IPC es el rubro de Alimentos y Bebidas No Alcohólicas (1,34%), en el que destaca el tomate con una incidencia positiva del 0,53%.
Noe Morón, presidente de la Federación de Productores Departamental de Horticultores y Fruticultores (Fedehfrut), dijo que el abastecimiento de tomate se restablecerá en plazo máximo de 100 días. "Ya las heladas pasaron y los compañeros están empezado a sembrar el producto", afirmó
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