Con el objetivo de cambiar la producción deficitaria de trigo, el Gobierno acaba de socializar con los sectores productivos, centros de investigación e instituciones del agro, el proyecto de incentivo e incremento de la producción de trigo con una inversión de 900 millones de dólares que, durante los próximo cinco años, buscará cubrir el 70% de la demanda interna de la materia prima de la harina.
Un desafío de cinco años. Según las autoridades de Gobierno y los productores, el diseño de dicho programa ya se encuentra en las instancias del Consejo Nacional de Política Económica (Conape) para fijar su aprobación técnica final para luego, mediante Decreto Supremo se viabilice en los próximos días. "El objetivo es llegar al 2018 con una cobertura del 70% de la demanda interna y al 2025 con el cien por ciento. En este momento el documento en fase de validación, está en análisis de las instancias superiores, cuya consideración tiene que ver si va a ser financiado o vía donaciones", informó escuetamente, Remy Gonzales, director de la Empresa de Semillas del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierra.
Por su parte, Demetrio Pérez, presidente de la Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo, apuntó que dicho proyecto tiene el propósito de acabar con la subvención de manera gradual en los próximos años a través de una agresiva política de producción del trigo. "Se está aprobando un proyecto de 900 millones de dólares. Se desarrollará en un periodo de cinco años. Ahí está el desafío del Estado ante la demanda interna que por hoy es deficitaria", informó.
Una dificultad histórica. El país experimenta cada año una baja producción de trigo, cuyo promedio oscila entre 35 y 40%. Según datos de la Empresa de Semillas, la demanda anual es de 750 mil toneladas de trigo. El 2013 la producción apenas alcanzó 286.768 toneladas. El proyecto implicará, señaló Gonzales, proveer nuevas variedades de semilla, dotación de maquinarias y ampliar la superficie agrícola.
Realidad
Una situación que depende de los precios
Incentivo. En 2010, el Gobierno introdujo un programa de incentivo al productor de trigo que consistía en incrementar el precio en 10 dólares más por tonelada del producto. Este hecho generó ese año ampliar la superficie de 80 mil hectáreas a 160 a nivel nacional.
Dinámica. Según la Cámara Agropecuaria del Oriente, la única manera de combatir la baja producción es generando incentivos al productor consistente en mejores precios, créditos, provisión de semillas y maquinaria.
Productores. El país registra un promedio de 120 mil productores de trigo que poseen una hectárea de sembradío.
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